Pincha banner para acceder Tienda pesca deportiva

jueves, 28 de julio de 2011

Pesca del reo en Galicia. En Federpesca nº 178 agosto 2011

El reo es uno de los peces estrella para los pescadores gallegos del caudal dulce. Esta especie en realidad es una variedad de la trucha pues su apariencia es prácticamente idéntica a la común pero en su ciclo vital alterna el río y el mar. Sobre todo destaca por su mayor tamaño que su hermana y la brava defensa durante la picada que hace disfrutar al pescador. Entrevistamos en Galicia al joven José Socastro, un galardonado especialista que conoce como nadie la técnica y al que se le considera uno de los mejores rastreadores de esta especie por los cotos gallegos.

Texto: José Luis Lago García

Fotografías: Autor / José Socastro /Manuel Suárez-Jesús Bolaño



Ante las trabas legales o casi imposibilidad para pescar salmones en Galicia, donde tras un sorteo prácticamente se otorga un día de permiso de coto en toda la temporada al pescador, otra opción de pesca por esta verde tierra es la entretenida captura de los reos.


El reo no deja de ser una variedad de trucha pues es prácticamente idéntica en su aspecto exterior, aunque hay ligeras variaciones de matices y morfología respecto a la común. De manera similar a lo que hacen sus primos los salmones, tras nacer en el río en torno a los dos años les suena su alarma biológica para migrar al mar. En el medio salado pasará entre uno a dos años para posteriormente retornar a su lugar de origen paraa desovar. Por esta característica que también se le conoce como trucha marina. Es una especie que únicamente deambula por nuestro norte peninsular nadando entre ríos y desembocaduras que abrazan el Cantábrico o Atlántico, siendo Galicia uno de los lugares donde más ejemplares suelen aparecer.

José Manuel Socastro todo un experto pescador de reo que me asesoró en este reportaje


En su periplo por aguas con salitre no se adentra a distancias tan asombrosas como los salmones hacia largas latitudes oceánicas, si no que se mantiene en puntos costeros más próximos a su lugar de origen. Por esto que su alimentación también es distinta a la de su pariente de mayor tamaño. Con estas peculiares características se le conoce como el hermano mayor de la trucha y el pariente pobre del salmón.


Este tránsito por el agua salada de los reos y su dieta marina les provoca cambios de aspecto en su carne interior que adquiere un tinte rosado –parecido al de los salmones- lo que modifica su sabor culinario respecto al de la trucha común.


Eso sí, cuanto más tiempo permanezca en el río en este regreso a sus orígenes y alimentación entre las aguas dulces de nuevo se vuelve a asemejar su morfología y gustillo gastronómico al de las truchas estacionarias. Esta peculiaridad no excluye que su apariencia, aspecto e incluso genética sea prácticamente idéntica a la trucha común ya que existen varios misterios sobre esta peculiar metamorfosis o adaptación.





Precisamente esta variada dieta combinada de río con mar provoca que esta especie sea habitualmente más grande o voluminosa que la trucha común, encontrando el pescador fluvial esporádicamente incluso piezas de más de cinco kilos. José Socastro, el experto especialista de esta especie que nos asesora se lamenta de que cada vez sea más difícil encontrar ejemplares de este tamaño: “Hoy en día son anecdóticas las capturas de cinco kilos, aunque no es tan extraño rebobinar durante la temporada varias piezas de dos a tres kilos. Desgraciadamente, por culpa de nuestros despropósitos humanos esto va a menos tanto en número de picadas como en el buen tamaño de las capturas”.



No obstante, como en tantos ríos españoles donde ya hubieron mejores épocas, José nos comenta cómo: “Es una pesca que te engancha, muy distinta incluso a la de la trucha común. A mí me tiene totalmente atrapado por el desafío que supone coger un buen reo, pero sobre todo por la fuerza y nobleza en su lucha, ofreciendo unas increíbles picadas”.



Y es que los fuertes combates son uno de los principales atractivos: “Sobre todo cuando son reos recién llegados del mar tienen una fuerte batalla. El puntero y el hilo tiran de tal manera que te crees que tienes un pez descomunal, ¡y luego resulta que es un pez pequeño de alrededor de menos de un kilo! Un gran batallador que es imprevisible en sus reacciones, ya que se revuelve con unos saltos increíbles, ¡y algunos incluso se sueltan por su bravura!”. Precisamente sobre este punto de peces perdidos José aplica la típica filosofía gallega: “Son tan fieros que muchos se escapan. ¡Menos mal, es el encanto de esta pesca porque si los pilláramos todos ya no habría ninguno!”. En cualquier nuestro entrevistado hace como deberían tantos pescadores practicar la suelta de las piezas que no son de gran tamaño, incluso muchas de las que cumplen la medida legal.


Puedes ver un avance de este artículo en la editorial de la revista PINCHA AQUÍ




EN LA PARTE INFERIOR LA ENTREVISTA ORIGINAL QUE LE HICE A ESTE EXPERTO PESCADOR DE REO PARA PREPARAR ESTE REPORTAJE Y QUE DA MÁS DATOS SOBRE ESTA MODALIDAD




Entrevista sobre la pesca del reo gallego al especialista JOSÉ SOCASTRO from sagarracarretes on Vimeo.


Os ofrecemos la entrevista original en el reproductor de la parte superios que le hice a José Socastro este pasado mes de octubre, donde cuenta los secretos de la pesca del reo en Galicia. Todo un documento interesantísimo sobre la pesca de esta trucha marina que alterna el agua dulce con la salada. EL DOCUMENTO SONORO ESTÁ ILUSTRADO CON MUCHAS IMÁGENES SOBRE LA PESCA DE ESTA ESPECIE


El risco o señuelo artesanal que simula un pequeño roedor que nada por el río y que es efectivo justo en el ocaso. Este curioso y efectivo señuelo lo montó José Socastro.




No hay comentarios:

Publicar un comentario