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sábado, 4 de septiembre de 2010

Mareo en barco.Pesca&barcos nº 21 julio-agosto 2010


Publicado en la revista Pesca&barcos nº 21 julio-agosto 2010



Mareo en barco
El enemigo dentro del cuerpo

Un gran problema de una jornada de pesca embarcada es el fatídico mareo, que puede llevar al traste un gran día de buenas capturas. Os contamos cómo evitarlo contando con el testimonio del capitán de pesca Andrés Paz, un profesional que navega varios meses seguidos en el Pacífico en busca de peces espada y tiburones en alta mar. Este marino conoce bien los efectos del mareo en carne propia, y por la de sus tripulantes.




Texto: José Luis Lago García
Fotografías: Autor y Andrés Paz

Para muchos pescadores lo que promete ser una inolvidable tarde de lance se puede convertir en un calvario cuando comienza el mareo. Poco a poco el cuerpo empieza a ser un cóctel de algunas sensaciones tan desagradables como vómitos, náuseas, vértigos, palidez, exceso de salivación, visión distorsionada, mal color, cansancio, frío, pulso acelerado, dolor de cabeza, sudoración fría, somnolencia, fatiga…que empiezan a minar corporal y anímicamente al pescador. Nuestro organismo sufre lo que se conoce con el nombre científico y médico de cinetosis, y cuyo mejor remedio será el volver a tierra y esperar a que el cuerpo se vuelva a estabilizar. Muchas veces se aguanta lo imposible en la borda por no chafar la salida al resto de la pandilla, o simplemente la angustiosa espera es obligada al estar el barco muy lejos del muelle. La amarga sensación sin duda genera que la mayoría de los mareados se prometan a sí mismos el no volver a embarcar nunca más, para no repetir de nuevo este martirio que con síntomas agudos puede dar incluso la sensación de estar a punto de fallecer. Pero realmente el verdadero problema está en no saber afrontarlo desde el punto de vista de la prevención, y muchas veces tomarlo a la ligera. Hay que asumir que de vez en cuando esto puede ocurrir en mayor o menor grado entre los habituales a la pesca embarcada.


Mal de todos


El mareo en sí no es una enfermedad, si no una reacción temporal del sistema nervioso ante una violenta situación a la que la naturaleza de nuestro organismo no está preparada, pues en realidad somos animales terrestres. En este malestar general tienen decisiva importancia las informaciones que llegan de los órganos vestibulares del oído, piel, músculos y vista que con el balanceo generan contradicciones en los sistemas receptivos del equilibrio.

En realidad, todos los humanos somos sensibles en mayor o medida a este mal, y el tópico que los navegantes expertos se acostumbran para siempre, o que hay personas inmunes, no es del todo cierto. Para confirmarlo, y saber más curiosidades sobre el mareo, entrevistamos al gallego Andrés Paz, capitán de barco profesional de peces espada y tiburones en el Pacífico. En su barco de 44 metros de eslora pasa varios meses continuos en alta mar frente al Perú sin tocar puerto, por lo que conoce bien esta situación. Nos aclara que ya desde sus inicios en la pesca: “Yo también me mareaba mucho, ¡es más!... ¡tardé muchísimos años en quitármelo de encima! Al principio de mi profesión, con tan solo 21 años pensé que por la frecuencia que me ocurría que no valdría para el mar. En mi segundo barco estuve vomitando más días de los previstos. En realidad me acostumbré poco a poco tras miles de horas a cubierta. Creo que el tipo de barco también influye, pues yo he estado en varias naves, y en unas me he mareado más que otras. Pienso que según el tipo de movimiento de cada nave puede incrementar los síntomas”.





El capitán Andrés Paz, entrevistado para este reportaje

Este curtido capitán que pasa varios meses en alta mar sin tocar puerto conoce bien los efectos negativos de las docenas de mareos sufridos en sus entrañas: “Cuando estás mal te vuelves más sensible, los olores se intensifican, estás más perceptivo, y casi todo te molesta, ¿son los olores lo que están mareando? ¡No!, ¡en realidad ya tienes el mal en el cuerpo y todo resulta más desagradable! Hay gente que pierde el control, pues la desesperación en largos mareos hace que algunas personas no razonen, e incluso se pongan agresivas porque ven que no les pasa tanto sufrimiento. El malestar es tan intenso, que incluso algunos creen que están a punto de morir”.



“Más vale prevenir”

El remedio más efectivo para el mareo es la prevención con pastillas adecuadas para evitarlo. Los fármacos con el compuesto dimenhidrinato son eficaces para atajar, o mejor dicho, prevenir este malestar. El remedio más conocido es la marca comercial conocida como Biodramina, pero también hay otros medicamentos de dimenhidrinato en el mercado, y con distintas posibilidades; como cafeína añadida para contrarrestar la somnolencia, supositorios, inyectables o chicles masticables. Lo normal es tomar un comprimido una hora antes de partir y complementar el efecto cada cierto tiempo siguiendo siempre las instrucciones del medicamento. En general la cadencia de ingesta de comprimidos suele ser de uno cada dos a cuatro horas, evitando tomar más dosis de las recomendadas.¿
REGLAS DE ORO PARA EVITAR EL MAREO

Un cuerpo descansado, con horas de sueño cubiertas y sin resaca o ingesta de alcohol reciente siempre tendrá menos tendencia al mareo

El café o demás estimulantes aceleran el sistema nervioso central, o lo que es lo mismo, la necesidad de vomitar cuando ya se está afectado

No beber alcohol a bordo y una vez mareado ingerir pequeños sorbos de agua

Evitar el tabaco, pero también como fumador pasivo, pues el humo amplifica el mareo

Las pastillas se toman un periodo antes de partir y posteriormente se refuerzan dosis según las instrucciones del fármaco

Comer sin excesos, pero también es bueno llenar el estómago repartiendo la ingesta a lo largo de la jornada, evitando grasas y alimentos muy condimentados. Frutas como manzanas o pan son adecuados

No ingerir comidas copiosas la noche anterior, y nunca tomar leche antes de partir, pues es muy indigesta

Si ya estás mareado siempre será relajante dormir, aunque únicamente se irá al interior del camarote en el caso de estar seguro de conciliar el sueño. Si tras varias intentonas no se consigue, lo mejor siempre será salir al aire libre

El aire puro siempre es beneficioso pues olores los desagradables del motor, ambientes cerrados, gases de escape del barco generarán más sensación de vértigos

Alejarse de las zonas más movidas del barcos y asentarse en las más tranquilas como la popa, así como los lugares altos de la nave favorecen también el mareo

Mantener la vista en el horizonte o puntos distantes fijos y evitar la mirada sobre las olas u otros objetos en movimiento

Evitar leer y no abusar de los prismáticos

Si notamos que estamos empezando a marearnos lo mejor será estar entretenidos: participar en tareas del barco, llevar el timón…pues si estamos quietos empezaremos a darle vueltas a que estamos mal, y acabaremos aún peor

¡Mucho cuidado al vomitar por una barandilla! No es el primer caso de un mareado que ha caído al agua pues en ese momento es una persona débil y desorientada que además puede desestabilizarse con el movimiento del mar. A veces es necesario sostenerles.

Acondicionar el cuerpo a la temperatura adecuada que pida el cuerpo: abrigarse si hace frío y destaparse en caso de insolación. Evitar el sol directo

El efecto placebo es muy importante, además de los comprimidos buscar la fórmula que cada persona crea que puede serle útil psicológicamente

En el caso de largas travesías una vez pasados dos días el cuerpo ya está habituado y normalmente nos se marea y los fármacos son innecesarios

Seleccionar el medicamento que nos aconseje nuestro farmacéutico y comprobar bien la dosis máxima diaria, efectos secundarios y contradicciones, sobre todo en niños y ancianos

Consultar bien el prospecto de los medicamentos, tener siempre reservas a mano para uno mismo y también para los demás, pues en este tema hay que ser solidario: ¡hoy por ti, mañana por mí!

Tener los aparejos preparados ya en tierra como líneas, montajes, anzuelos armados…pues anudar a bordo obliga a fijar la vista en objetos estáticos y cercanos, lo que aumenta el mareo

¿Sales a pescar sin cañas o cebos? Pues aplica el mismo recordatorio para las pastillas del mareo

Las personas con enfermedades crónicas deben evitar el mareo tomando medidas pues corren el riesgo de que se agrave su dolencia en este periodo

Los medicamentos utilizados suelen producir somnolencias, valorar esta circunstancia o adquirir marcas que añaden cafeína para compensar este efecto

(REPORTAJE COMPLETO EN LA REVISTA)

2 comentarios:

  1. yo creo que el mareo se puede evitar perfectamente hay algunos consejos que pueden ayudar pero si no como tu comentas en el blog se puede recurrir a antimareos, la Biodramina funciona muy bien, yo la llevo siempre cuando salgo a pescar. Como remedio natural se puede probar también el jengibre aunque la Biodramina es más eficaz segun mi experiencia.

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  2. Un mareo en barco es horrible, a mi la biodramina (hasta la que lleva cafeina) me da somnolencia, hemos descubierto en EEUU unas GOTAS NATURALES ANTIMAREO se aplican detras de la oreja, no es medicación las MOTION EAZE antimareo y ahora en España ya las venden! en malamarshop. Realmente quitan esta sensación estomacal

    http://malamarshop.com/index.php?id_product=8&controller=product&id_lang=3

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